Según un estudio, los tuiteros felices -en los que trato de incluirme- nos relacionamos más con los que compartimos un mismo nivel de felicidad. Los cíentificos no saben por qué. Yo si. En twitter, como en la vida, buscamos rodearnos de gente que nos aporte cosas buenas, que nos de energía y ganas de vivir. Simple.
Es el típico ejemplo de un amigo que siempre esta triste, que sólo te llama para contarte sus penas… esa gente te va chupando la energía. En twitter pasa igual. Por eso, tanto en la vida como en Twitter tratamos de rodearnos de personas que nos suben los niveles de felicidad y tratamos de subir los niveles de felicidad. En las redes sociales -virtuales, o no- laxas o sólidas uno construye en función del ROI emocional y twitter no iba a ser menos.
Vía Marketingdirecto