El email marketing es una de las estrategias digitales más efectivas y rentables, pero aún existen muchos mitos que generan dudas entre los profesionales. En este artículo, ampliamos y desmontamos 24 mitos para que puedas aprovechar al máximo esta herramienta. Cada mito se explica en detalle, con dos párrafos que clarifican por qué es falso y cómo puedes evitarlo.
1. El email marketing está obsoleto
Aunque muchas personas creen que el correo electrónico ha quedado desplazado por las redes sociales y otras plataformas digitales, la realidad es que sigue siendo uno de los canales más efectivos y utilizados. Según un estudio de Radicati Group, se espera que el número de usuarios de correo electrónico activos en el mundo supere los 4.000 millones en 2025. Este crecimiento demuestra que el email sigue siendo una herramienta fundamental en la comunicación digital.
Además, el email marketing ofrece un retorno de inversión (ROI) excepcional. Según una encuesta de Litmus, por cada dólar invertido en email marketing, se obtiene un retorno promedio de $36. Esto lo convierte en una de las estrategias más rentables para las empresas, tanto grandes como pequeñas. Su capacidad para segmentar audiencias, personalizar mensajes y medir resultados lo mantiene vigente y eficaz.
2. Todo correo masivo es spam
Una de las creencias más comunes es que enviar correos masivos automáticamente los convierte en spam. Sin embargo, esto no es cierto. El spam es el envío de correos no solicitados, mientras que el email masivo dirigido a una lista de suscriptores que han dado su consentimiento expreso es completamente legal y efectivo.

La clave está en obtener el consentimiento previo y asegurarte de que el contenido sea relevante para tus destinatarios. Por ejemplo, si alguien se suscribe a tu newsletter para recibir ofertas, enviarle promociones es totalmente válido. Lo que debes evitar es comprar listas de correo o enviar mensajes no solicitados, ya que eso sí se considera spam y puede dañar la reputación de tu marca.
3. El asunto del email lo es todo
El asunto es sin duda un elemento crucial para captar la atención del receptor y aumentar la tasa de apertura. Sin embargo, no es lo único que importa. Un asunto atractivo puede llevar al receptor a abrir el correo, pero si el contenido no cumple con las expectativas generadas, es probable que pierdas su interés y confianza.
Por ejemplo, si usas un asunto sensacionalista como “¡No te pierdas esta oferta increíble!”, pero el contenido no ofrece nada de valor, es probable que el receptor se sienta decepcionado. La clave está en equilibrar un asunto impactante con un contenido relevante y útil que satisfaga las necesidades del lector.
4. Los emojis en el asunto siempre funcionan
Los emojis pueden ser una herramienta efectiva para llamar la atención y dar un toque informal a los asuntos de los correos. Sin embargo, no siempre son la mejor opción. Su efectividad depende de varios factores, como la audiencia a la que te diriges y el contexto en el que se utilizan.

Por ejemplo, si tu público es más formal, como profesionales de negocios, los emojis pueden parecer poco profesionales e incluso generar desconfianza. Además, algunos usuarios lo asociarán con spam o phishing. Por eso, es importante conocer a tu audiencia y realizar pruebas A/B para determinar si los emojis funcionan en tu caso.
5. Comprar listas de correo es una buena idea
Comprar listas de correo puede parecer una forma rápida de aumentar tu base de suscriptores, pero es una práctica contraproducente. Estas listas suelen estar compuestas por direcciones no verificadas o personas que no están realmente interesadas en tu contenido, lo que puede dañar la reputación de tu marca.
Además, enviar correos a personas que no han dado su consentimiento puede violar regulaciones como el RGPD (Reglamento General de Protección de Datos). En lugar de comprar listas, es mucho más efectivo construir tu propia lista de suscriptores orgánicos, asegurándote de que los interesados opten por recibir tus comunicaciones.
6. El email marketing es costoso
Muchas personas creen que el email marketing es una estrategia costosa, pero la realidad es que existen herramientas gratuitas o de bajo costo que permiten crear y enviar campañas de manera efectiva. Plataformas como Mailchimp, Sendinblue o acumbamail ofrecen planes gratuitos para pequeñas listas de suscriptores.
Además, el email marketing es una de las estrategias con mejor ROI. Según un informe de DMA, por cada dólar invertido, las empresas obtienen un retorno promedio de $42. Esto lo convierte en una opción accesible y altamente rentable para empresas de todos los tamaños.
7. Solo las grandes empresas pueden beneficiarse del email marketing
Este es un mito común, pero el email marketing es igualmente efectivo para pequeñas y medianas empresas. De hecho, puede ser una herramienta especialmente útil para startups y negocios locales que buscan llegar a una audiencia más amplia de manera económica.
Las pequeñas empresas pueden aprovechar el email marketing para construir relaciones con sus clientes, fidelizarlos y aumentar sus ventas. Personalizar los mensajes y segmentar la audiencia son estrategias que cualquier empresa puede implementar, independientemente de su tamaño.
8. Enviar más correos significa mejores resultados
Si bien enviar correos con frecuencia puede mantener a tu marca presente en la mente de los suscriptores, el exceso puede ser contraproducente. Enviar demasiados correos puede saturar a tus destinatarios, llevándolos a darse de baja o a marcar tus mensajes como spam.
La clave está en encontrar el equilibrio entre la frecuencia y la relevancia del contenido. Realiza pruebas A/B para determinar cuántos correos son adecuados para tu audiencia y asegúrate de que cada uno ofrezca un valor real.
9. Los emails largos no funcionan
Existe la creencia de que los correos largos son aburrid y no se leen, pero esto no siempre es cierto. La efectividad de un email no depende únicamente de su longitud, sino de la calidad del contenido. Si el mensaje es relevante, interesante y está bien estructurado, los suscriptores lo leerán de principio a fin.
Por ejemplo, los boletines informativos o los correos con guías detalladas pueden ser largos, pero si ofrecen información valiosa, los destinatarios apreciarán el esfuerzo. La clave es saber cuándo usar emails largos (para contenido educativo o explicativo) y cuándo optar por mensajes cortos (para promociones o recordatorios).
10. Las imágenes son esenciales en cada correo
Si bien las imágenes pueden mejorar el aspecto visual de un email, no son indispensables. Muchas campañas exitosas se basan únicamente en texto, especialmente cuando el mensaje es claro y directo. El uso excesivo de imágenes puede distraer o, en algunos casos, hacer que el correo sea bloqueado por los filtros antispam.
Por ejemplo, los boletines informativos o los correos con guías detalladas pueden ser largos, pero si ofrecen información valiosa, los destinatarios apreciarán el esfuerzo. La clave es saber cuándo usar emails largos (para contenido educativo o explicativo) y cuándo optar por mensajes cortos (para promociones o recordatorios).
10. Las imágenes son esenciales en cada correo
Si bien las imágenes pueden mejorar el aspecto visual de un email, no son indispensables. Muchas campañas exitosas se basan únicamente en texto, especialmente cuando el mensaje es claro y directo. El uso excesivo de imágenes puede distraer o, en algunos casos, hacer que el correo sea bloqueado por los filtros antispam.
Además, es importante asegurarte de que las imágenes no sean el único elemento que comunica tu mensaje. Algunos usuarios tienen desactivada la visualización automática de imágenes en sus clientes de correo, por lo que un diseño basado solo en imágenes puede perder efectividad.
11. Los millennials no usan correo electrónico
Este mito surge de la idea de que los millennials solo usan redes sociales y aplicaciones de mensajería. Sin embargo, numerosos estudios demuestran que los millennials sí utilizan el correo electrónico, especialmente para recibir descuentos, ofertas y contenido de valor. Por ejemplo, según Salesforce, el 73% de los millennials prefieren las comunicaciones comerciales por correo electrónico.
Además, el correo electrónico es una herramienta clave para construir relaciones a largo plazo con este grupo demográfico. Los millennials valoran la personalización y la relevancia del contenido, por lo que enviar correos con ofertas exclusivas o información útil puede ser muy efectivo.
12. El pie de página no se lee
Aunque el pie de página no es la parte más destacada de un correo, es un espacio importante para incluir información adicional que puede ser útil para los suscriptores. Por ejemplo, puedes usar esta sección para añadir enlaces a tus redes sociales, políticas de privacidad o la opción de darse de baja.
Además, un pie de página bien diseñado puede reforzar la imagen de tu marca. Si incluyes un mensaje personalizado, como un agradecimiento o una llamada a la acción, puedes generar una impresión positiva y fomentar la interacción con tus suscriptores.
13. No es necesario optimizar para móviles
Con más del 60% de los correos electrónicos abiertos en dispositivos móviles, ignorar la optimización para móviles es un grave error. Los correos que no se adaptan a pantallas más pequeñas pueden ser difíciles de leer y navegar, lo que lleva a los usuarios a ignorarlos o eliminarlos.

La optimización para móviles implica usar un diseño responsivo, textos legibles y botones de acción que sean fáciles de tocar. Si tus correos no están optimizados, estás perdiendo una gran oportunidad de conectar con tu audiencia en el dispositivo que más utilizan.
14. La tasa de apertura es la métrica más importante
Aunque la tasa de apertura es un indicador útil para medir el interés inicial, no es la única métrica importante. La tasa de clics, la tasa de conversión y el ROI son igualmente cruciales para evaluar el éxito de una campaña. Por ejemplo, un correo con una alta tasa de apertura pero una baja tasa de clics puede indicar que el contenido no es relevante para los destinatarios.
Por eso, es esencial analizar todas las métricas en conjunto. Esto te permitirá identificar qué aspectos de tu campaña están funcionando y cuáles necesitan mejorar.
15. El email marketing solo sirve para vender
El email marketing no se limita a generar ventas; también es una herramienta poderosa para fidelizar clientes, brindar soporte y construir relaciones. Por ejemplo, puedes enviar correos con contenido educativo, tutoriales, encuestas o mensajes de agradecimiento para fortalecer la conexión con tu audiencia.
Además, el email marketing es ideal para crear una comunidad alrededor de tu marca. Compartir historias, novedades o eventos exclusivos puede generar un sentido de pertenencia y mantener a tus suscriptores comprometidos con tu marca.
16. Hay un horario perfecto para enviar emails
Muchas personas creen que existe un horario mágico para enviar correos, pero esto no es cierto. El mejor momento para enviar correos depende de tu audiencia y sus hábitos. Por ejemplo, si tu público está compuesto principalmente por profesionales, enviar correos temprano en la mañana o al mediodía puede ser efectivo.
La mejor forma de determinar el horario ideal es realizar pruebas A/B. Experimenta con diferentes días y horas para identificar cuándo tus suscriptores son más receptivos.
17. Segmentar la lista de correos no es necesario
La segmentación es una de las prácticas más importantes en el email marketing, ya que te permite enviar contenido relevante y personalizado a grupos específicos de suscriptores. Ignorar esta práctica puede resultar en correos genéricos que no resuenan con nadie.
Por ejemplo, puedes segmentar tu lista por ubicación, intereses o comportamiento de compra. Esto te permitirá enviar ofertas personalizadas, como descuentos para clientes frecuentes o contenido específico para nuevos suscriptores.
18. Los usuarios inactivos deben eliminarse
Aunque es tentador eliminar a los usuarios inactivos de tu lista de correos, es mejor intentar reactivarlos primero. Enviarles una campaña especial, como un descuento exclusivo o un mensaje personalizado, puede reavivar su interés en tu marca.
Además, los usuarios inactivos no necesariamente están desinteresados; pueden haber dejado de abrir tus correos porque el contenido no era relevante para ellos. Revisa tus estrategias y prueba nuevos enfoques antes de decidir eliminarlos.
19. Es mejor enviar correos diariamente para mantener el engagement
Enviar correos con demasiada frecuencia puede ser contraproducente. Los suscriptores pueden sentirse abrumados y optar por darse de baja o marcar tus correos como spam. La frecuencia ideal depende de tu audiencia y del tipo de contenido que ofreces.

Por ejemplo, si tienes una tienda online, enviar correos semanales con ofertas y novedades puede ser más efectivo que hacerlo diariamente. La clave es encontrar un equilibrio que mantenga a tu audiencia interesada sin saturarla. Además, siempre es una buena idea preguntar a tus suscriptores con qué frecuencia prefieren recibir correos.
20. Comprar listas de correos es una buena idea
Comprar listas de correos es una práctica desaconsejada por varias razones. En primer lugar, estas listas suelen estar compuestas por personas que no han dado su consentimiento explícito para recibir tus correos, lo que puede llevar a que tus mensajes sean marcados como spam.
Además, los suscriptores comprados no tienen un interés genuino en tu marca, lo que resulta en bajas tasas de apertura y conversión. Es mucho más efectivo construir tu propia lista mediante estrategias como formularios de suscripción en tu sitio web, ofertas de contenido exclusivo o eventos.
21. El diseño debe ser lo más llamativo posible
Un diseño llamativo puede captar la atención, pero si no respalda el mensaje, no será efectivo. Muchas veces, menos es más. Un diseño limpio, con una jerarquía clara y un mensaje directo, puede ser más efectivo que un correo cargado de elementos visuales.

Además, un diseño excesivamente complejo puede distraer al lector o dificultar la lectura en dispositivos móviles. La clave es equilibrar el diseño con el contenido, asegurándote de que el mensaje sea claro y fácil de entender.
22. No hay que preocuparse por la tasa de rebote
La tasa de rebote es un indicador importante que mide el porcentaje de correos que no se entregaron correctamente. Ignorar esta métrica puede llevarte a mantener direcciones de correo inválidas en tu lista, lo que afecta negativamente tu reputación como remitente.
Es importante clasificar los rebotes en «soft» (temporales, como un buzón lleno) y «hard» (permanentes, como una dirección inexistente). Elimina las direcciones que generen rebotes duros y actualiza tu lista regularmente para mantenerla limpia y efectiva.
23. El email marketing no funciona en sectores competitivos
Algunas personas creen que el email marketing no es efectivo en sectores altamente competitivos, pero esto no es cierto. La clave está en diferenciarte a través de la personalización, la segmentación y el contenido relevante.
Por ejemplo, si te encuentras en un mercado saturado, puedes destacar enviando correos con contenido educativo, casos de éxito o testimonios de clientes. La calidad y la relevancia del contenido marcan la diferencia, independientemente de la competencia.
24. No es necesario probar diferentes estilos de contenido
Experimentar con diferentes tipos de contenido es esencial para descubrir lo que más resuena con tu audiencia. Algunos suscriptores prefieren correos cortos y directos, mientras que otros aprecian los emails más detallados e informativos.
Prueba diferentes formatos, como listas, vídeos, infografías o historias, y analiza qué genera mejor respuesta. La prueba y el ajuste continuo son fundamentales para optimizar tus campañas y maximizar su impacto.
Conclusión: El email marketing sigue siendo una herramienta poderosa
Después de desmontar estos 24 mitos, queda claro que el email marketing sigue siendo una de las estrategias más efectivas y rentables en el mundo digital. Sin embargo, su éxito depende de cómo se implemente. Evitar estos errores comunes y adoptar buenas prácticas, como la segmentación, la personalización y la optimización para móviles, puede marcar la diferencia entre una campaña exitosa y una que no logra sus objetivos.
El email marketing no solo es útil para generar ventas, sino también para fidelizar clientes, brindar soporte y construir una comunidad alrededor de tu marca. Con herramientas accesibles y enfoques basados en datos, cualquier empresa, independientemente de su tamaño o sector, puede aprovechar esta estrategia.
Si todavía tienes dudas o temores sobre el email marketing, recuerda que el aprendizaje y la experimentación son clave. Prueba diferentes enfoques, mide los resultados y ajusta tus estrategias según lo que funcione mejor para tu audiencia.
En un mundo en el que la atención es cada vez más escasa, el email marketing bien ejecutado puede ser tu aliado para conectar de manera auténtica y efectiva con tus clientes. ¡No dejes que los mitos te detengan! Es hora de aprovechar todo el potencial del email marketing y llevarlo al siguiente nivel.
¿Listo para empezar? ¡No esperes más y comienza a impulsar tu estrategia de email marketing hoy mismo! 🚀