En un giro inesperado o no en el mundo de la tecnología y el diseño, Adobe ha anunciado la cancelación de su plan para adquirir la innovadora plataforma de diseño de productos Figma. El acuerdo, valorado en 20 mil millones de dólares, se ha visto obstaculizado por las crecientes preocupaciones de los reguladores tanto en el Reino Unido como en la Unión Europea, lo que ha llevado a ambas compañías a dar un paso atrás en su ambicioso proyecto de fusión.
Como consecuencia de esta decisión, Adobe se ve obligado a pagar a Figma una considerable suma de 1 mil millones de dólares como tarifa de terminación inversa. «A pesar de estar en desacuerdo con los hallazgos de los reguladores, creemos que proceder de forma independiente es lo mejor para ambas partes», explicó Shantanu Narayen, presidente y CEO de Adobe. La visión compartida de Adobe y Figma de transformar el futuro de la creatividad y la productividad se ha visto truncada, aunque Adobe sigue comprometida con su misión de revolucionar las experiencias digitales personalizadas.
El foco de preocupación de los reguladores radicaba en el potencial monopolio que Adobe podría ejercer en el mercado del software de diseño. La adquisición de Figma, que ha ganado popularidad superando a la aplicación XD de Adobe, planteaba dudas sobre la posible restricción a la innovación en el sector. Estas inquietudes se vieron reflejadas en las voces de los diseñadores y en los diversos análisis realizados desde el anuncio de la fusión en septiembre de 2022.
En diciembre, Adobe rechazó las medidas correctivas propuestas por la Autoridad de Competencia y Mercados del Reino Unido (CMA), que incluían la desinversión de activos y la transferencia de código fuente e ingenieros. Se esperaba que las discusiones sobre la decisión preliminar de la CMA de bloquear el acuerdo se llevaran a cabo a finales de diciembre, con una fecha límite en febrero de 2023 para la decisión final.
La Comisión Europea y el Departamento de Justicia de EE.UU. también estaban examinando el acuerdo con un escrutinio detallado. Tras la última actualización de Adobe, la Comisión Europea ha suspendido su investigación sobre la fusión.
En un contexto de presión regulatoria y obstáculos legales, Adobe ha encontrado limitadas opciones para seguir adelante con la adquisición y obtener todos los activos deseados de Figma. «A pesar de nuestro esfuerzo y miles de horas dedicadas a los reguladores globales, ya no vemos un camino hacia la aprobación regulatoria», expresó Dylan Field, CEO de Figma.
Esta noticia marca un momento decisivo en la industria tecnológica, subrayando la creciente vigilancia regulatoria en grandes fusiones y adquisiciones, y poniendo de manifiesto los desafíos que enfrentan las empresas para navegar en el complejo panorama legal y competitivo de hoy en día.
