El regreso de LaLiga en la temporada 2025/2026 no solo ha devuelto la emoción del fútbol a los estadios y televisores, sino que también ha reabierto un viejo frente en Internet: los bloqueos masivos de direcciones IP ordenados para frenar la piratería de retransmisiones. Como ocurrió en campañas anteriores, los principales operadores de telecomunicaciones en España —Movistar, Vodafone y Orange— han aplicado bloqueos coordinados en los minutos previos al inicio de los partidos, lo que ha derivado en la caída de webs y servicios completamente ajenos al fútbol.
El minuto a minuto de los bloqueos
Los problemas comenzaron a hacerse visibles desde la mañana del primer encuentro. Usuarios de Movistar reportaron a las 7:10 que sus conexiones mostraban errores 451 al intentar acceder a algunas páginas. Horas más tarde, coincidiendo con el arranque del partido a las 19:00, el error se transformó en un blackhole, lo que implica un bloqueo total del tráfico hacia esas direcciones.
En Vodafone, la situación se reprodujo con matices: primero aparecieron mensajes genéricos que aludían a “causas ajenas a la compañía” y, posteriormente, la operadora pasó a bloquear también dominios completos. Por su parte, Orange aplicó directamente bloqueos en masa, tanto en fibra como en datos móviles, ampliando así el alcance del corte.
Todo esto sucedió, según los testimonios recogidos en foros como bandaancha.eu, en un margen de entre 5 y 10 minutos antes de que comenzaran los partidos. La coordinación temporal no deja lugar a dudas: los bloqueos forman parte del operativo de LaLiga contra la piratería.
Un marco legal polémico
La base de estas actuaciones se encuentra en la sentencia del Juzgado de lo Mercantil nº 6 de Barcelona, que en diciembre de 2024 autorizó a LaLiga a solicitar el bloqueo dinámico de direcciones IP cada semana. El objetivo es proteger los derechos de retransmisión, un negocio que mueve miles de millones de euros y constituye una de las principales fuentes de ingresos de los clubes españoles.
Sin embargo, la polémica surge por la forma en que se ejecutan esos bloqueos. Las direcciones IP señaladas no siempre son exclusivas de páginas de piratería. Servicios globales como Cloudflare concentran a miles de webs bajo las mismas direcciones, por lo que un solo bloqueo puede dejar fuera de servicio a aplicaciones de todo tipo, desde servicios educativos hasta plataformas empresariales.
Cloudflare ya ha denunciado públicamente el impacto de estas prácticas y mantiene abierto un procedimiento legal contra LaLiga en España, acusándola de actuar de manera desproporcionada y de provocar daños colaterales injustificados a usuarios y empresas.
El malestar de los usuarios
El efecto práctico de estos bloqueos se refleja en la frustración de miles de ciudadanos. Quienes cambiaron de operador con la esperanza de esquivar la medida se han encontrado con que todas las grandes compañías aplican la misma estrategia.
“Pensaba que en Orange me libraría, pero ahora bloquean igual que Movistar”, relataba un usuario en foros de tecnología. Otros ironizaban con que los únicos beneficiados son los proveedores de VPNs, ya que para muchos la única manera de recuperar el acceso a determinadas webs pasa por usar estas herramientas.
La contradicción es evidente: mientras que quienes buscan retransmisiones piratas siguen encontrando vías de acceso con relativa facilidad, los bloqueos afectan sobre todo a usuarios que nada tienen que ver con el fútbol. “Es matar moscas a cañonazos”, comentaba gráficamente un afectado en redes sociales.
Un debate mayor: neutralidad y derechos digitales
Más allá de la coyuntura futbolística, el caso ha reabierto un debate sobre la neutralidad de la red en España. Organizaciones de defensa de los derechos digitales denuncian que las medidas ordenadas por los tribunales y ejecutadas por los operadores comprometen principios básicos como el derecho a la información y la libertad de acceso a servicios en línea.
Expertos en ciberseguridad advierten, además, de que la estrategia puede sentar un precedente peligroso: si se normaliza el bloqueo de direcciones compartidas, cualquier servicio global podría verse afectado por orden judicial en un futuro cercano.
Mientras tanto, en el plano político, algunos grupos parlamentarios han pedido que se revisen los mecanismos de bloqueo para garantizar que sean más selectivos y que no afecten a ciudadanos ajenos a la piratería.
LaLiga, firme en su postura
Pese a las críticas, LaLiga defiende la legitimidad y necesidad de estas actuaciones. Argumenta que la piratería de retransmisiones deportivas provoca pérdidas millonarias y erosiona el modelo económico que sostiene a los clubes y al propio campeonato.
Desde la organización insisten en que los bloqueos se realizan con autorización judicial y con la colaboración de los operadores, en un esfuerzo conjunto por preservar la viabilidad de un producto que genera empleo e ingresos para múltiples sectores.
La realidad: un Internet más fragmentado
El arranque de esta temporada ha dejado claro que los bloqueos han llegado para quedarse. Al menos durante cada jornada de LaLiga, el acceso a determinadas webs quedará restringido en España, afectando tanto a quienes intentan ver partidos sin pagar como a miles de usuarios ajenos al fútbol.
La paradoja es que, mientras el fútbol español se blinda contra la piratería con medidas cada vez más estrictas, los daños colaterales amenazan con abrir un debate mayor sobre el futuro de Internet en el país: ¿seguirá siendo una red abierta y neutral, o se consolidará un modelo en el que las decisiones de un sector puedan condicionar el acceso de todos?
Preguntas frecuentes (FAQ)
1. ¿Por qué se producen estos bloqueos durante los partidos de LaLiga?
Porque LaLiga cuenta con autorización judicial para ordenar a los operadores que bloqueen direcciones IP vinculadas a retransmisiones ilegales en tiempo real.
2. ¿Qué operadores aplican los bloqueos en España?
Movistar, Vodafone y Orange aplican bloqueos de manera coordinada. Incluso en servicios móviles, los usuarios han reportado caídas de webs durante los encuentros.
3. ¿Por qué se ven afectadas páginas que no tienen nada que ver con el fútbol?
Muchas webs utilizan servicios como Cloudflare, que agrupan múltiples páginas bajo las mismas direcciones IP. Cuando una IP es bloqueada, caen todas las webs asociadas.
4. ¿Qué opciones tienen los usuarios para esquivar los bloqueos?
Algunos recurren a VPNs o herramientas como Cloudflare Warp. Sin embargo, estas soluciones no siempre funcionan y también pueden verse limitadas por nuevas medidas de bloqueo.
vía: messenger