Hasta MARCA lo cuenta: los bloqueos antipiratería de LaLiga dejaron a miles de jugadores sin acceso a un videojuego

Se repite el patrón de “daños colaterales”. El diario MARCA —habitualmente alineado con el ecosistema del fútbol profesional— publicó que los bloqueos masivos de IP de Cloudflare impulsados por LaLiga para combatir retransmisiones pirata impidieron el acceso al free-to-play Blue Protocol: Star Resonance durante el fin de semana del 18 de octubre. Según la crónica, el corte coincidió con el arranque de la jornada liguera: la editora del juego, A Plus, protege su infraestructura a través de Cloudflare, y los rangos filtrados tocaron de lleno a los servidores del título.

No es el primer caso. Semanas atrás, Steam también se vio afectada por el mismo mecanismo de bloqueo, y en redes sociales se acumulan los testimonios de comercios, proyectos pequeños y particulares que —sobre todo en fines de semana— pierden acceso a servicios legítimos por filtrado de IP compartidas. El problema es estructural: en un Internet multi-inquilino y CDN-izado, una misma IP sirve a muchos dominios. Si se bloquea “a martillo”, se apaga todo lo que cuelga de esa IP, no solo el objetivo perseguido.

Captura de pantalla 2025 10 21 a las 9.25.49

Qué ha pasado

  • Cuándo: fin de semana del 18 de octubre (inicio de jornada).
  • Quiénes: LaLiga ordena bloqueos; Cloudflare aloja seguridad/CDN de la editora; el afectado directo es Blue Protocol: Star Resonance (Shanghai Bokura Network Technology / A Plus).
  • Síntoma: miles de jugadores reportan que no pueden iniciar sesión ni conectarse a servidores.
  • Por qué ahora: el juego se lanzó el 9 de octubre; con el aumento de tráfico, habría entrado en el radar de los sistemas de rastreo/bloqueo usados contra streaming pirata.

Por qué importa

  • Impacto en usuarios: un free-to-play que monetiza por microtransacciones puede sufrir pérdidas si se interrumpe el servicio en los picos de tiempo libre.
  • Efecto sistémico: el bloqueo por IP compartida es proporcionalmente agresivo; puede arrastrar a servicios legítimos que comparten la misma infraestructura.
  • Reputación y confianza: cada incidente alimenta la percepción de que la herramienta es desmedida, erosiona la neutralidad operativa de la red y traslada el coste a inocentes.

El fondo del debate

Nadie discute que haya que proteger los derechos sobre las retransmisiones. El problema es cómo. La práctica de filtrar rangos de IP de Cloudflare para “apagar” señales ilícitas no discrimina lo suficiente y castiga a terceros. La alternativa técnica y jurídica pasa por medidas más granulares y trazables (por dominio/URL/DNS, fingerprints de contenido, órdenes con ventanas de revisión y canales de des-bloqueo claros), de forma que la lucha antipiratería no rompa lo que no debe.

Qué pueden hacer los actores implicados

  • Titulares de derechos / solicitantes: exigir bloqueos selectivos, con listas versionadas, plazos y procedimiento de rectificación.
  • CDN y editores: reforzar telemetría para aislar servicios, habilitar IP/ASN alternativos y canales de emergencia con operadores.
  • Operadores: aplicar bloqueos con criterios de mínima afectación, mantener listas auditables y vías de reclamación ágil para terceros afectados.
  • Reguladores/juzgados: fijar proporcionalidad, transparencia y SLA de remediación en las órdenes, con supervisión independiente.

La noticia de MARCA marca un punto de inflexión mediático: el problema ya no es una queja de nicho técnico; trasciende al público general. Si no se corrige la mecánica, habrá más fines de semana con usuarios legítimos apagados por una guerra que no es la suya.

Noticia en marca.com y visto en bandaancha.eu

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Lo último

×